En un panel realizado en el Banco Central del Ecuador hace algunas semanas, en conmemoración de los 25 años de haberse implementado el sistema de dolarización en el país, algunos analistas coincidieron en señalar que para que este se haya mantenido a lo largo del tiempo, el papel de los migrantes ha sido fundamental.
Y aunque uno de los ponentes aseguró que un riesgo real para la economía sería una emisión de una moneda (física o digital) paralela, a través de la cual se imprima sin control, también es cierto que se necesita un ingreso de dólares permanente. Mientras mayor sea, mejor..
Una de las fuentes ingreso de divisas, son las remesas de los migrantes.
Por eso, la dura política antimigratoria puesta en marcha por el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, desde el primer día de asumir el mando, el 20 de enero del 2025, puede impactar a Ecuador en un futuro.
Algunos organismos estiman que unos 800.000 compatriotas estarían viviendo en Estados Unidos.
Según Migration Policy Institute, Ecuador ha experimentado tres grandes oleadas de emigración. A mediados de 2020, alrededor del 8% de su población vivía en el extranjero, según las Naciones Unidas.
Estos migrantes representan la tercera nacionalidad latinoamericana más grande, tanto en Italia como en España y uno de los grupos extranjeros más numerosos en el área metropolitana de Nueva York. Una cantidad importante de los ecuatorianos que emigran lo hacen de manera irregular y pertenecen a diferentes provincias del país.
El éxodo ha continuado con fuerza en los últimos cinco años, tras la pandemia y la crisis de inseguridad.
Pero, ¿Cuál es el peso de la migración en dólares?
Conforme las cifras registradas por el Banco Central del Ecuador (BCE), las remesas recibidas durante el 2023 registraron un récord histórico, al sumar USD 5.447 millones, es decir, 4,6% del Producto Interno Bruto (PIB).
En términos de crecimiento, significó 148% más frente al 2022 y 68,4% frente al año prepandemia (2019).
Estados Unidos es el país del cual se recibe más remesas. En el 2023, USD 3.881 millones totalizaron los montos que llegaron de ese país, es decir representó el 71,2% del total.
En el 2024 los envíos siguieron creciendo y se prevé que cuando se publiquen las cifras anuales definitivas se romperá un nuevo récord.
Durante el tercer trimestre de 2024, el país recibió USD 1.748,5 millones por concepto de remesas, lo que representa un crecimiento del 8,5% respecto al valor registrado en el segundo trimestre de 2024 (USD 1.611,1 millones) y del 24,4% en comparación con el tercer trimestre de 2023 (USD 1.405,9 millones).
En cuanto a los principales países de origen, el 74,5% (USD 1.302,2 millones) del flujo total de remesas provino de los Estados Unidos, con un incremento del 10,6% en comparación con el segundo trimestre de 2024 (USD 1.177,8 millones) y del 30,1% frente al mismo periodo de 2023 (USD 1.000,6 millones).
En el acumulado de enero a septiembre del año pasado, las remesas que llegaron representan cerca del 4% del PIB y probablemente superen los 6.000 millones de dólares.


Por todo lo que está en juego, la decisión dada por Trump resulta peligrosa para la llegada de dólares a la economía nacional.
Es necesario darle atención a la evolución de este indicador, para tomar las medidas del caso.
También habrá que analizar el desenvolvimiento de las accciones de deportación del gobierno estadounidense. Por ahora, ha señalado que más de 32.000 ecuatorianos figuran en la lista.
La llegada de dólares de las remesas tiene impacto en diferentes actividades productivas del país, entre ellas la financiera.
Según el BCE, en el tercer trimestre de 2024, el 59,2% del flujo de remesas se canalizó a través de bancos privados, con acreditación a cuentas y liquidación en efectivo, utilizando empresas auxiliares de servicios financieros.
“Por otro lado, las empresas remesadoras contribuyeron con un 37,8%, con acreditación a cuentas a través de entidades financieras corresponsales y pagos en efectivo en sus oficinas y agentes afianzados. Finalmente, las cooperativas de ahorro y crédito, junto con las asociaciones mutualistas, representaron el 3,0% restante, con acreditaciones a cuentas de ahorro”.
Autor: Carolina Enríquez Paredes