Según un artículo de Bloomberg, en los últimos 50 años han existido dos fases en que el mundo ha experimentado un período de superciclo en los precios de los commodities: la primera el fin del sistema Bretton Woods en los años 70´s y la segunda el período 2001-2014 marcado por el rápido crecimiento de la economía China principalmente.
Según este artículo los superciclos surgen cuando existe un aumento sustancial de la demanda que supera ampliamente las proyecciones y que termina provocando un déficit de oferta. La duración de este superciclo dependería del tiempo en que la demanda excedería el nivel de oferta y cuánto tiempo llevaría a la oferta reajustarse a esta nueva dinámica del mercado.
En el 2021 el mundo enfrenta una serie de circunstancias que podrían defender esta tesis:
Otros economistas advierten que habrá únicamente un aumento cíclico de los precios en el muy corto plazo (quizás 1 o 2 años) debido a que existen razones estructurales que podrían contener este efecto:
Finalmente, la rápida extensión en el mundo de la nueva variante delta del coronavirus, ha puesto en alerta al mundo por su alto grado de transmisibilidad lo cual podría frenar los planes de alivianar algunas restricciones, frenando así el ritmo de recuperación de algunas economías.
Independientemente de si será un ciclo prolongado o un alza temporal de los precios de los commodities, este aumento de los precios de una buena parte de las materias primas, sumado a una rápida reactivación de la mayoría de países en el mundo y reforzado por el debilitamiento del dólar frente a otra cesta de monedas, anticipan que el 2021 será un año excepcional para nuestras exportaciones y para muchas economías de América Latina en general. Esta vez impulsado no sólo por un buen comportamiento de la cesta de productos no petroleros (que incluso en el 2020 presentaron un crecimiento del 10%) sino también por un fuerte repunte de las exportaciones petroleras.
Con relación a las exportaciones petroleras, la recuperación del precio del crudo tiene implicaciones fiscales y monetarias interesantes, permitiendo así al gobierno alivianar su déficit fiscal durante este año, fortalecer el nivel de las reservas internacionales y generar una mayor holgura para cumplir las metas establecidas en el programa del Fondo Monetario Internacional (aunque las metas se encuentran por ahora en revisión).
Si repasamos brevemente algunos números, con datos de enero a mayo, las exportaciones totales presentan un crecimiento anual de 28,5% frente al mismo período del año anterior, mientras que si comparamos datos de 2020 frente a 2019 (ene-may) habían decrecido en -15%. Con relación a los precios del petróleo, las exportaciones de crudo presentan un repunte de 92% (con un peso en el total de exportaciones de 34%) mientras que el año anterior habían decrecido en -51%. Se espera que en el 2021 el petróleo WTI alcance en promedio los USD 66 el barril.